La ética no es otra cosa que la reverencia por la vida
Albert Schweitzer (1875-1965) Filósofo alemán
Sin soslayar la importancia que tendrán las muy diversas disposiciones legales que se crearán y otras más que se ajustarán, el Sistema Estatal Anticorrupción tendrá como clave del éxito la conformación del consejo ciudadano, cuya responsabilidad recaerá en el Congreso del Estado.
Al igual que sucederá en el contexto nacional, el sistema en ese nivel también tendrá como eje de acción preponderante al grupo de representantes ciudadanos que designe el Senado de la República.
En el caso michoacano, no es menos vital esa designación. En la medida en que los diputados locales logren escoger los perfiles requeridos, el sistema tendrá éxito. El marco legal es importante, sí, pero mucho más lo es el perfil de quiénes lo aplicarán.
Los antecedentes y el contexto ciertamente obligan a la duda, porque históricamente las bancadas legislativas se han ido por el camino ruin y pervertido de designar espacios en organismos supuestamente ciudadanizados, en base a cuotas, lo que significa que cada favorecido con la designación asume el compromiso con el partido que lo palomeó, no con la ciudadanía a la que en teoría representa.
¿Serán capaces en esta ocasión los diputados de no ceder a la tentación de designar a los cinco integrantes del Sistema Estatal Anticorrupción, con ese principio de cuotas? No lo sé. Esperaría que sí, que ahora no pongan por delante esa sucia tradición y que vayan por perfiles realmente apartidistas, con capacidad y preparación, pero sobre todo, moralmente sólidos.
Y es que su compromiso será fundamental: nada más y nada menos que aplicar una política de estado que supuestamente irá a fondo contra la corrupción, el gran problema de México, la corrupción.
Si el Congreso se va por el camino de siempre, de distribuirse los espacios como rebanadas de pastel, ya podemos ir anunciando el fracaso del Sistema Estatal Anticorrupción, más allá de que pueda incluso haber buenas leyes. La clave, insisto, estará en la conformación del equipo humano. Por ahora, mantengo el recelo. Veremos.