Hace unos días, concretamente el 18 de mayo la capital de Michoacán llamada Morelia desde 1828 celebró su aniversario 481, así entre el pasado y el presente no deja de edificarse futuro. La densidad histórica de la antigua Valladolid resulta impresionante porque si revisamos la lucha insurgente por la independencia nacional encontramos uno de esos motores en el egregio Colegio de San Nicolás de Hidalgo, recinto clave al conjuntar inteligencias como las de quien fuera su rector Miguel Hidalgo y Costilla y un alumno de paso trascendente como lo fue José María Morelos y Pavón, el más grande hijo de la capital michoacana, de ahí el nombre de Morelia.
En el pasado encontramos personas, signos y hechos que contribuyen para forjar identidad, nos dotan de legados que perduran y desfilan a través de la memoria histórica que mantiene riquezas sin que sean ajadas por el olvido para mantener en lo alto los estandartes de causas que fueron valerosas.
Recién en Morelia se verificó en sesión solemne de cabildo del 18 de mayo, en el marco del evento festivo por el aniversario de la ciudad se confirió la Presea Generalísimo Morelos a un distinguido nicolaita moreliano, nos referimos al ius filósofo Marco Antonio Aguilar Cortés, quien ha sido presidente municipal de Morelia, rector de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, diputado federal y local, así como magistrado presidente del Poder Judicial de nuestra entidad, entre muchos cargos de alta responsabilidad.
Aguilar Cortés se ha distinguido en la academia, en el ámbito judicial, en actividades políticas y como legislador, durante décadas ha impartido la cátedra de Filosofía del Derecho como lo recordó en su intervención el gobernador de Michoacán Alfredo Ramírez Bedolla.
Honrar honra aseveró en alguna ocasión un excelso poeta, periodista y maestro como lo fue el cubano universal José Martí, se trató de un reconocimiento aprobado por unanimidad del cabildo moreliano, un merecido reconocimiento para Marco Antonio Aguilar Cortés maestro de muchas generaciones en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de nuestra máxima casa de estudios.
En otra razón de ideas, la polarización política no disminuye porque los desencuentros entre los actores contrarios están todos los días, ha sido prematura la carrera por la sucesión presidencial que motivó el presidente Andrés Manuel López Obrador, ya no se siguen las liturgias del antiguo régimen aunque la contienda al interior de Morena principalmente entre Claudia Sheinbaum y Marcelo Ebrard no es precisamente tersa, ni lo será.
Hace unos días el canciller fue increpado por un presunto simpatizante de la jefa de Gobierno de la capital del país, pudo ser peor, dichas manifestaciones podrían replicarse y esas conductas no abonan para fortalecer la civilidad, ni es lo deseable y no es un asunto netamente político porque si lo fuera tendría otro nivel porque lo importante es debatir ideas para no anclarse en las descalificaciones.
Próximamente serán las elecciones en seis estados del país, sorprende que la oposición política no se reinvente, de acuerdo a las encuestas que se publicitan constantemente registrará un serio revés en la mayor parte de las entidades. Falta competencia política, mayor calidad y un discurso fresco además de liderazgos emergentes sin los mismos de hace décadas que coleccionan fracasos.