De verdad que MORENA, el partido del gobernador Alfredo Ramírez Bedolla no deja de sorprendernos, la convocatoria para “festejar” el triunfo electoral del actual mandatario con la realización del BedollaFest resultó un reverendo fracaso político para la militancia del partido en Michoacán, donde no hubo un llamado a la unidad, a la reconciliación y al reagrupamiento de militantes.
Su pasarela disfrazada de festival, terminó convirtiéndose en una excelente ocasión para que una de las corcholatas atrajera, a cuenta del gobierno morenista, los reflectores con miras a la adelantada sucesión presidencial.
Y digo que la convocatoria fue un fracaso, porque al viejo estilo priista que tanto desprecia la ciudadanía y que pensábamos que la democracia mexicana estaba por superar, MORENA volvió a las prácticas nocivas del acarreo, la entrega de la torta y el refresco, las amenazas por no acudir, las agresiones contra la prensa, y hasta el pase de lista a burócratas que fueron obligados a estar presentes en el festival.
Con poca afluencia, al mitin acudió el mandatario michoacano acompañado del secretario de Gobernación, Adán Augusto López, del dirigente nacional y aliado de Ramírez Bedolla, Mario Delgado y de diputados y alcaldes de la cuarta transformación.
Los únicos que no acudieron fueron Raúl Morón y la dirigencia encabezada por Ana Lilia Guillén.
Lo peor es que la verdadera militancia morenista, que está confundida y decepcionada del actual gobierno estatal, prefirió no y ante el abandono está lista en participar y apoyar otros proyectos políticos.
Para el aspirante presidencial Agusto Adán López, Ramírez Bedolla será el gran transformador que necesita Michoacán, recordó que la entidad padeció las consecuencias de malos gobiernos que privilegiaron el bien propio sobre las necesidades del pueblo.
Por su parte Mario Delgado acusó al ex gobernador Silvano Aureoles de desviar los recursos que la federación le enviaba para el sector educativo, pero descartó que el gobierno de Michoacán tenga como prioridad meter a la cárcel al exmandatario, comentario que le correspondería hacerlo al gobernador y no al dirigente de un partido.
Finalmente, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla comentó que se sentía muy contento con el trabajo que ha realizado hasta el momento, recordó que recibió a la entidad con grandes retos que no son sencillos pero que se está avanzando bien.
Mientras tanto, la presidenta del Comité Ejecutivo Estatal de MORENA, Ana Lilia Guillén Quiróz, señaló que no fue invitada al festival y que impugnó ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la convocatoria para renovar los órganos directivos emitida por su partido y que no reconoce el proceso donde resultó elegida como dirigente.
Mientras toda esta grilla de cuarta se lleva a cabo, Michoacán sigue ubicado, día a día, semana tras semana encabezando las estadísticas nacionales sobre asesinatos, homicidios dolosos, masacres, feminicidios y extorsiones y ocupar los últimos lugares de aprovechamiento académico, científico y tecnológico.
Contrario al optimismo gubernamental, la ciudadanía reclama que no hay nada que festejar.