LA VOZ DE QUIENES NO SON ESCUCHADOS
Hoy celebramos el Día del Locutor, de quienes trabajamos con nuestra voz y frente a un micrófono en diversos medios de comunicación con el propósito de transmitir diversos contenidos, a veces comerciales o de servicio pero principalmente para orientar, informar, entretener o divertir al auditorio.
No hay nada más gratificante para un locutor o cronista que el reconocimiento de sus radioescuchas por hacerlos pasar un buen rato o darles a conocer noticias que impactarán en su vida cotidiana.
Su agradecimiento se demuestra al contar nuevamente con su atención todos los días y a la misma hora, lealtad que el locutor logra de su auditorio, gracias al profesionalismo, a la credibilidad, oportunidad o estilo de cada comunicador.
Ser locutor no es tarea fácil, en ocasiones con nuestra voz debemos transmitir emociones a veces positivas y en otras no tanto, tenemos que dar vida a personajes o narrar un acontecimiento para hacer sentir a nuestro auditorio que está presente.
Existen varios tipos de locutores: de animación que dan vida y diversión a un programa; locutores de comercial que usan su voz para poder vender algún producto; el locutor de noticias cuya importancia es mayor si es imparcial y genera credibilidad en su auditorio, el locutor de deportes que debe ser apasionado con excelente narrativa y una memoria prodigiosa.
A veces toca ser la voz de quien no son escuchados por la autoridad y hacer nuestras sus demandas.
También hay locutores actores que tienen un excelente manejo de su voz para poder representar cualquier personaje en fonética y acento. Sin embargo las cosas han cambiado mucho.
Ahora existen también los llamados locutores de cabina, que llegan frente al micrófono para hablar de un solo tema convirtiéndose en un monólogo que a veces puede ser aburrido.
Habría que recordar que la locución, está considerada una actividad profesional, para la cual hace algunos años había que prepararse y presentar un examen teórico y práctico sumamente complicado, generalmente cultura general, manejo del lenguaje y pronunciación de palabras en diversos idiomas.
El título como Locutor podía ser A o B y lo expedía la Secretaría de Educación Pública con validez oficial, el cual era requerido y requisito indispensable para sentarse frente a un micrófono en cualquier medio de comunicación.
Sin embargo desde su cancelación el 8 de Febrero de 2016 cuando el Diario Oficial de la Federación publicó un decreto que derogaba el trámite de certificado o licencia, hoy podemos escuchar todo tipo de voces y de contenidos, cualquier persona puede sentarse frente a un micrófono y hablar de todo o de nada.
Pero hoy quiero felicitar a todos nuestros colegas, a todos los trabajadores de la Industria de la radio y la televisión, a los operadores y de técnicos de cabina o estudio, mis mejores deseos para todos ustedes.
Ser locutor implica una enorme responsabilidad, es una profesión que llevo en el corazón y que disfruto con pasión a cada instante que estoy frente al micrófono, porque sé que alguien, allá afuera, me escucha, y tal vez los que diga pueda ayudarle a reflexionar y le sea útil en su vida.
Felicidades colegas!!
