A POCO SÓLO 29…
El hackeo realizado por el grupo Guacamaya al servido de la SEDENA, sigue revelando las obscuras relaciones de personajes de la política nacional con los grupos de narcotraficantes y del crimen organizado, como lo han revelado investigaciones periodísticas sobre los nexos de un cártel con el gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco y de la supuesta relación de 29 Presidentes Municipales de Michoacán con algún grupo criminal.
Según datos de Inteligencia militar, los alcaldes michoacanos mantienen algún tipo de relación con células criminales que mantienen el control de vastas zonas del territorio michoacano, aunque las autoridades digan lo contrario.
De inmediato, algunos de los alcaldes señalados han negado cualquier vínculo, especialmente los ediles de la región limítrofe con el estado de Jalisco.
También representantes de partidos políticos del PRI y del PAN en la entidad, han declarado que se investigue a los alcaldes señalados en los archivos de la SEDENA para que se deslinden responsabilidades.
Para nadie es una sorpresa que en Michoacán, muchas de las autoridades municipales cohabitan con los cárteles y grupos criminales de su región, más bien debería sorprendernos que las autoridades estatales finjan desconocer que esa relación existe.
En algunos casos, los mismos grupos antisociales promueven a candidatos y en otros amenazan a los funcionarios municipales para que colaboren con ellos, so pena de represalias en su contra o de sus familias si no acceden.
El gobernador Alfredo Ramírez Bedolla se refirió a delicada acusación como un “chismorreo público en redes que sólo trata generar suspicacias”.
Pese a lo que diga, por supuesto que existen ayuntamientos michoacanos que colaboran con el narco, la cuestión es que no son 29, son muchos más.