MÁS POBRES Y MÁS CORRUPCIÓN
Dos de las principales promesas de campaña del presidente Andrés Manuel López Obrador, el reducir la pobreza y terminar con la corrupción, ejes fundamentales de su política de la llamada cuarta transformación, no se han cumplido, incluso, a cuatro años de su gobierno la situación ha empeorado, hay cuatro millones más de pobres en México y la corrupción sigue en aumento y sin castigo.
Sobre éste último aspecto, el país ha retrocedido en los últimos cuatro años en indicadores internacionales en la lucha contra la corrupción, y se ubica entre las naciones peor evaluadas en la materia.
El retroceso en la lucha contra la corrupción, se debe principalmente a la impunidad prevaleciente, tanto para casos de corrupción cometidos en otras administraciones como los registrados en los últimos cuatro años.
La promesa política de erradicar la corrupción no se ha cumplido, admitió el director de Transparencia Mexicana, Eduardo Bohórquez, aseguró que los grandes casos de corrupción siguen sin recibir sentencia y el dinero desviado por las tramas de corrupción tampoco están de vuelta en las arcas de la Nación.
En todas las evaluaciones internacionales sobre los índices de precepción de corrupción, México ha retrocedido especialmente en los últimos cuatro años.
Por lo que hace a la lucha contra la pobreza, las noticias no son alentadoras, según el reporte de la CEPAL, México tiene al término de éste 2022, dos millones y medio más de pobres. La pobreza en el territorio nacional pasará de 34.9 por ciento a 36.2 por ciento de la población poniendo en riesgo su seguridad alimentaria.
La alta inflación y el poco crecimiento económico aunado a la falta de políticas públicas reales que beneficien a este amplio sector de la población así como el desvío de recursos destinados a ellos, seguirá ocasionando que, cada vez exista un mayor número de pobres en México.
Es así como la cuarta transformación está fallando al principal reclamo social de freno a la corrupción y al compromiso moral de mejorar la situación de millones de mexicanos.
Ahí están las cifras, ahí están los resultados de las investigaciones internacionales independientes que el presidente López Obrador siempre desdeña, simplemente porque no le favorecen porque presentan las cosas, tal y como son.
