Diversos movimientos y expresiones se hacen presentes en nuestro país con la intención de figurar, aportar diagnósticos, análisis y propuestas de cara a la sucesión presidencial del próximo año, seguramente habrá una creciente efervescencia conforme avancen los meses y se llegue al proceso electoral que se advierte será especial por todo lo que se ha dicho y hecho en los últimos tiempos en los que aflora la discrepancia como una constante.
En lo que ha transcurrido de la actual administración la polarización ha sido un elemento común, las pugnas del presidente con la oposición son cotidianas, una visión maniquea recorre los escenarios políticos. Es evidente que se necesita un debate que contraste proyectos de nación, sería muy útil para el país.
Llama la atención la reciente presentación del Colectivo por México, ente en el que se incluyen políticos, académicos e intelectuales de diversa orientación ideológica de evidentes trayectorias en el quehacer público quienes abonan para el diseño de un proyecto de país basado en la realidad, es decir en lo que tenemos.
Originalmente destacaba en la citada expresión el ingeniero Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, referente de la lucha por la democracia que recuerda al Frente Democrático Nacional, antecedente directo del Partido de la Revolución Democrática. Ex gobernador de Michoacán y ex jefe de Gobierno de la Ciudad de México, primero en la historia moderna en ser electo por la vía democrática, Cárdenas Solórzano fue candidato a la presidencia en 1988, 1994 y el año 2000. Cabe señalar que el ex candidato a la primera magistratura en tres ocasiones no estuvo presente en la presentación del colectivo el lunes 30 de enero.
Más allá de asuntos partidistas y coyunturas políticas, el sitial en la historia de Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano es indiscutible tras una brega de larga data en pro de la democratización de México. Solo que el martes 31 de enero el ex candidato a la presidencia de la república se deslindó públicamente del citado colectivo, ello luego de que en la conferencia mañanera el mandatario López Obrador dijera que sería su adversario si participaba con lo que él denominó el ala moderada del conservadurismo, el hijo de Cuauhtémoc, Lázaro Cárdenas Batel es el coordinador de asesores del gobierno federal.
También figura Francisco Labastida Ochoa, a quien muchos recordarán por haber sido el candidato del Partido Revolucionario Institucional en el año 2000 que perdió la presidencia ante Vicente Fox para acabar con la hegemonía priista de siete décadas. También integran al Colectivo por México el ex rector de la UNAM José Narro Robles, el jurista Diego Valadés y la académica Clara Jusidman.
El colectivo no está aliado a ningún partido político, afirman que no son promotores de candidato alguno, sus propuestas estarán a la vista. Hablan de fortalecer al país porque se vive “un estado omiso, autoritario y que militariza desde el poder”.
Se requiere en la actualidad de un debate serio, propositivo, para que se eleve el nivel de la discusión pública que en muchas veces registra insensateces y diatriba, enconos, resentimientos y amarguras.
El Colectivo por México presenta un diagnóstico, propuestas y toma de posición en tópicos importantes como la globalización y el medio ambiente, propone un solo México que debe ser uno y plural. Aborda el tema de la economía, salud y cultura.
La diversidad hace bien al país, es legítimo, nadie detenta el monopolio de la verdad, existen matices, ideologías que se oponen una a otra, lo peor que sucedería en cualquier sociedad sería la existencia de un pensamiento único porque entonces si se atentaría contra la democracia en donde la disidencia y discrepancia son elementos naturales.
