En estos tiempos de informes gubernamentales tanto de presidencias municipales como próximamente el del gobierno estatal, nada tiene de extraordinario, si no fuera el informe del presidente municipal de Morelia, Alfonso Martínez que es independiente, aunque como ya se sabe con un pasado panista.
Así de esta manera, en un documento de más de 200 páginas presento su segundo informe de gobierno municipal, donde destaco la actividad turística, la inversión privada y la seguridad pública como principales logros alcanzados en casi dos años de gobierno “independiente”.
En estas dos últimas semanas Martínez ha generado una fuerte polémica en cuanto al proceso de la licitación a particulares del alumbrado público, no obstante la controvertida decisión de cerrar algunas calles del centro histórico para convertirlas en peatonales para entregárselas a los ciudadanos, perjudicando a los comerciantes y supuestamente fomentar la actividad turística, que según él en el último año han visitado Morelia más de 2 millones de turistas de acuerdo al sector hotelero.
Además, en su informe destaco el aumento de la inversión productiva con la instalación de nuevas fábricas y servicios que generaran varios miles de empleos.
En materia de seguridad, el municipio cuenta con más de 400 policías-que por cierto no cuentan con la confianza de la mayoría de los ciudadanos- y se pretende llegar a 900 elementos para garantizar la seguridad pública.
En un formato que resulto todo un show mediático a través de cinco videos fue dando cifras y mas cifras para convencer a los invitados y a la potencial audiencia que seguiría un mensaje por radio y televisión en un formato fuera de los cánones de la formalidad y echando mano de la mercadotecnia política que de comunicación política no tiene nada.
La obligación constitucional de informar sobre el estado que guardan la administración pública en este caso municipal no es sinónimo de rendición de cuentas, ni para Alfonso Martínez, ni para cualquier gobernante, aunque en el mismo mensaje pronunciado a través de videos como ya se dijo en su mayor parte y en un Teatro Morelos casi lleno por la clase política Moreliana, mientras el “populacho” lo veía y escuchaba a fuera del teatro en pantallas gigantes mientras que la luz del sol caía entre los acarreados por los jefes de tenencias en el clásico ritual de la política mexicana el apoyo al presidente en turno.
El mensaje mediante el uso de videos que son utilizados para la promoción personal de Alfonso Martínez en los próximos días también tiene un costo financiero para los contribuyentes del municipio de Morelia buscado su reelección y que seguramente fueron hechos por una agencia de publicidad no local.
Mientras tanto los morelianos siguen sufriendo el ataque de la delincuencia común, calles y avenidas llenas de baches como la Pedregal y del poniente colindante con el estadio Morelos y la proliferación de giros rojos y estas colonias seguramente el presidente municipal ni las conoce.
Así de esta manera todavía falta auditar estos dos años de la administración del gobierno disque independiente de Alfonso Martínez.
Porque informar no es sinónimo de transparentar, ni mucho menos de rendir cuentas en este caso en el municipio de Morelia, donde por cierto su plan de gran visión no se materializa en el desarrollo urbano de Morelia y el equipamiento de la ciudad y tenencias, además que hace falta una política pública activa en materia de conurbación.
De esta manera el segundo informe del gobierno independiente de Alfonso Martínez no tiene nada de extraordinario por que el municipio sigue con sus mismos problemas estructurales y por lo tanto no lo hace diferente de que tenga o no tenga partido político que lo apoye. ¿Será la misma gata pero revolcada de independiente?