¿SERVIRÁ DE ALGO EL CONVENIO DE SEGURIDAD?
Finalmente, el alcalde moreliano Alfonso Martínez Alcázar se animó a signar el Convenio de Coordinación en Seguridad para la capital del Estado, toda vez que logró imponer sus condiciones al gobierno de Alfredo Ramírez Bedolla y que estriban básicamente en mantener su autonomía en el uso del presupuesto y podrá nombrar al director de la corporación.
Con este convenio se reforzarán las acciones en materia de seguridad pública y se consolidará una agenda conjunta de trabajo en materia de prevención, atención y disminución de los delitos del fuero común.
Otros de los beneficios que adquiere el municipio moreliano, es que podrá acceder a los recursos del FORTAPAZ, con lo que aumentará el número de policías, la certificación de los elementos y el equipamiento con recursos sostenibles.
Es decir, Morelia podrá acceder a 113.6 millones de pesos adicionales para acciones de seguridad, de los cuales 75 millones será para los elementos, 21 millones para bomberos y el resto se destinará a acciones de prevención en las 20 colonias con mayor índice delictivo.
Ya era hora que éste convenio lo firmaran ambas instancias de gobierno, porque Morelia sigue presentando altos índices de violencia, al igual que los 60 municipios que ya han signado el Convenio.
La clave para que el compromiso institucional tenga éxito es la existencia de una verdadera coordinación entre los tres niveles de gobierno y respetar las atribuciones de cada quién.
Gran sensibilidad mostró el gobernador Ramírez Bedolla al no generar imposiciones y respetar las condiciones del alcalde para la firma de convenio, haciendo a un lado los tintes político.
Su firma ya se había convertido en el centro de críticas sobre las pretensiones del gobierno morenista de apoderarse de la corporación moreliana y de sus recursos.
Aunque existe un claro rechazo al mando de la policía moreliana por parte de las autoridades del gobierno estatal, esto podrá enmendarse si el comisionado Alejandro González Cussi presenta su certificación y exámenes de control y confianza.
No así, el Director de Tránsito y Movilidad de la Secretaría de Seguridad Pública, quien se ha hecho de la vista gorda ante el gran cúmulo de denuncias sobre las violaciones a los derechos humanos de decenas de automovilistas por parte de los elementos policiacos de tránsito, además de los repetidos actos de extorsión, práctica que los han convertido en la corporación más corrupta de la zona centro del país.
Que bueno que el alcalde no permitió que se contamine a la incipiente policía moreliana, porque muchos de los agentes de tránsito estatales son unos verdaderos profesionales, pero en eso de la extorsión.
Pero de éste fenómeno, seguro el gobernador no está ni enterado.
¿Cree usted estimado auditorio que la firma del convenio coadyuvará a la reducción de los delitos en nuestra ciudad?…veremos