La honestidad no es una virtud, es una obligación
Andrés Calamaro (1961-?) Cantante argentino
Es claro que a Andrés Manuel López Obrador le interesa el volumen, no la calidad. Sólo así se explica que acepte literalmente lo que caiga en sus filas, al margen del perfil y la calidad moral y ética de los personajes que se suman, casi todos convenencieramente a su proyecto.
Así ha sucedido históricamente y así se confirmó este domingo, con la ratificación de una serie de incorporaciones de perredistas y ex perredistas a Morena.
Y la pregunta es obligada: ¿cómo de qué le sirven a López Obrador que nombres como Leonel Godoy, Fidel Calderón, Graciela Andrade, Raúl Morón o Aída Sagrero, se sumen a su proyecto? Si lo tratamos de medir en términos de aportación de propuestas de vanguardia, de poco. Si es en calidad y estatura moral, de menos aún, por no decir que de nada. Difícilmente alguno de ellos pasaría un examen de probidad.
Pero es evidente que se trata de echar montón, todo lo demás sale sobrando. Y, para ser francos, el tabasqueño sabe que el electorado mexicano no tiene la menor capacidad de análisis y por tanto no dimensiona ese tipo de fenómenos. El endiosamiento que produce en sus huestes López Obrador, le genera un manto de inmunidad a yerros o a incorporaciones tan cuestionadas como las de este domingo en Michoacán.
Ya se sabe que en el fondo, lo que buscan Godoy, Calderón, Andrade, Morón y Sagrero, y de todos los demás perredistas que dan la espalda al partido que los encumbró y les dio poder político y, sobre todo, económico, es mantenerse ligados
a la ubre presupuestal. Suponen que ello es más viable tratando de subirse al tren lopez obradorista, que mantenerse en el perredismo, y es altamente probable que su razonamiento tenga fundamento.
Aún estamos a la espera de conocer incorporaciones al proyecto de López Obrador, pero de perfiles intachables, de probada calidad moral y ética, no sólo “raspita”. Me refiero en particular a los de la clase política. Al menos en Michoacán, aún no veo uno con esas condiciones. Quizá después. jaimelopezmartinez@hotmail.com twitter@jaimelopezmtz>