MÉXICO EN ALERTA POR LA ESCASES DE AGUA
Ha comenzado la cuenta regresiva para el “Día Cero”, el día que vastas regiones del territorio nacional se quedarán sin agua por la extrema sequía, por lo que las zonas que primero se verán afectadas, deben estar en alerta.
Todos los mexicanos estamos conscientes de la emergencia que estamos sufriendo en el país por falta de agua. Y es que en el 2023 hubo una fuerte escasez de lluvias y desafortunadamente, ya estamos sufriendo las consecuencias, además de padecer los embates del Cambio Climático y el fenómeno de El Niño.
Expertos del Instituto de Geofísica de la UNAM aseguran que, para entender la magnitud de esta problemática, habría que analizar la situación en la Ciudad de México y su zona conurbada, donde años de sequía intensa han impedido la recarga adecuada de las presas, fuentes vitales de agua para la región.
Para el estudio realizado, basado en información proporcionada por la NASA, México se segmentó en tres regiones distintas en cuanto a disponibilidad hídrica y demanda: sureste, centro y noreste, cada una con sus particularidades.
En el sureste, la abundancia de agua contrasta con su uso limitado, una paradoja que resalta la necesidad de políticas para su mejor aprovechamiento.
En contraste, la región centro alberga grandes ciudades y sectores industriales que ejercen una presión significativa sobre los recursos hídricos locales.
Mientras tanto, el noreste enfrenta una realidad más árida debido a las escasas precipitaciones, exacerbando la escasez, por lo que se advierte que las ciudades del noreste serán las primeras en experimentar el ‘Día Cero’ será Tijuana así como áreas del estado de Nuevo León. De ahí se vendrá en cascada la falta del vital líquido en la zona metropolitana de la Ciudad de México, además del centro y occidente del país.
Es claro que se necesitan soluciones integrales y sostenibles para abordar la crisis hídrica en México. Esto implica no solo buscar nuevas fuentes de abastecimiento, sino también implementar políticas de conservación y uso eficiente del agua en todas las regiones del país.
Además, hay que aprovechar el desarrollo de sistemas de recolección y tratamiento de aguas pluviales, la implementación de tecnologías de riego inteligente en la agricultura y el fomento de prácticas industriales sostenibles son solo algunas de las medidas que pueden marcar la diferencia a largo plazo.
A nivel individual, podemos contribuir adoptando hábitos que reduzcan nuestro consumo de agua, como reparar fugas, utilizar tecnologías más eficientes en el hogar y fomentar la reutilización del agua en actividades cotidianas.
Y usted, ¿ya comenzó a cuidar el agua?