En participaciones anteriores, comentaba que uno de los subsectores del turismo que había presentado buenos números después de la pandemia habían sido precisamente los aeropuertos de México. Recordemos que en el país hay 60 aeropuertos, unos más conocidos que otros, pero que junto con la llegada de algunas aerolíneas regionales han ido ganando pasajeros.
Un caso particular es el aeropuerto en Tulum, que en cosa de meses ya recibió vuelos internacionales y sigue creciendo la demanda, mismo que es administrado por los militares, ya que era parte de la base aérea militar y fue reacondicionado para ser abierto al público. En su primer mes de operación, el Aeropuerto Internacional de Tulum Felipe Carrillo Puerto, inaugurado en diciembre pasado, registró un mejor arranque que el Felipe Ángeles (AIFA), al ser utilizado por 38,878 pasajeros, de acuerdo con datos de Agencia Federal de Aviación Civil (AFAC).
En tanto que la ruta más exitosa en su primer mes de operaciones fue el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México, con 20,169 pasajeros; en segundo lugar el AIFA, con 7,443; en tercero Monterrey, con 7,022; en cuarto Tijuana, con 2,233 y en la quinta posición Guadalajara, con 2,011 personas. En la actualidad el aeropuerto tiene rutas internacionales a Dallas, Houston, Atlanta, Miami, New York, Charlotte y los Ángeles.
También, no hay que olvidar el auge que está tomando el aeropuerto de Puerto Escondido y el de Tepic, que se maneja dentro de la red de Aeropuertos y Servicios Auxiliares (ASA), organismo desconcentrado del gobierno federal, que tiene a su vez 19 aeropuertos bajo esta modalidad y algunos con gobiernos estatales, que por cierto, cada vez más se menciona entre los empresarios, el alto interés para que algunos de los aeropuertos que tiene ASA puedan dar origen a un nuevo grupo aeroportuario, claro que ese sería ya tema del próximo gobierno.
Pero mientras eso sucede, los datos de los principales grupos aeroportuarios mexicanos han sido reveladores, y se ve, de acuerdo con análisis hechos por especialistas, que el entorno se ha complicado de cara al 2024. En el caso de los grupos Asur, GAP y OMA, transportaron un total de 12.9 millones de pasajeros al inicio del segundo trimestre de 2024.
Los tres grupos tuvieron diversos números, pero el punto coincidente es que la demanda se destacó por mostrar cierto debilitamiento al inicio del segundo trimestre del año y todos se han visto afectados por la caída en el tráfico de pasajeros domésticos.
Por lo que el tráfico de pasajeros en este año se ve retador, ya que no hay que olvidar que las dos aerolíneas de bajo costo que tienen un gran poder en el mercado doméstico se enfrentan a una menor disposición de aeronaves por el llamado a mantenimiento de los motores P&W.
Este tema, sin duda, debe seguirse de cerca porque hará que en todo el año no se registre en estos grupos aeroportuarios un crecimiento importante en el tráfico de pasajeros, pero ojo, eso no significa que no crezcan en otros lados; ellos, por ejemplo, tienen el enfoque en desarrollar el tráfico internacional ante el regreso de México a la categoría 1.
Adicionalmente se prenden las alertas luego que en días recientes han surgido rumores en el sector de la aviación mexicana que aseguran que existen altas posibilidades de que México regrese a la categoría 2 en seguridad aérea.
Recordemos que México estuvo degradado a categoría 2 durante 27 meses y que las aerolíneas mexicanas tuvieron pérdidas por más de 7 mil millones de pesos.
Lo cierto es que el año, entre las elecciones y un menor dinamismo de la economía, pinta lento para estos aeropuertos.