LA DUDA DE BIDEN
Vaya Día de la Independencia vivieron nuestros vecinos estadunidenses este 4 de Julio, donde sigue existiendo la duda respecto a la campaña electoral del presidente Joe Biden; la incertidumbre crece entre los ciudadanos porque se desconoce si se mantendrá como candidato o se hará a un lado.
Todo apuntaba a que se iban a llevar a cabo grandes celebraciones: La Administración de Seguridad en el Transporte, reportó un récord de casi 3 millones de personas que viajaron por los aeropuertos del país en un solo día la semana pasada, y que se prevé que esa cifra sea superada esta semana, y la Asociación Automovilística Estadounidense proyectó que 60,6 millones de personas viajaron en auto durante la festividad.
Pero el tradicional asado, las hamburguesas, los fuegos pirotécnicos y los desfiles, se vieron eclipsados por el factor electoral que mantiene la atención y preocupación de los estadunidenses, especialmente entre los demócratas, por la incompetencia que mostro Biden en el debate contra Donal Trump.
El presidente demócrata, de 81 años, se enfrenta a crecientes llamados para retirar su candidatura para las elecciones presidenciales de noviembre, en las que aspira a un segundo mandato, debido a serias preocupaciones sobre su salud y lo avanzado de su edad.
No obstante, Biden reconoce que le fue mal en el debate, pero dijo que 90 minutos no pueden borra lo hecho en tres años y medio; por su parte la Casa Blanca rechazó rotundamente el miércoles la posibilidad de que Biden abandone la carrera.
El presidente habría revelado a gente de su confianza en días pasados que, de no puede convencer a la gente de que aún está preparado para el puesto, no podrá salvar su candidatura y todo parece indicar que así será.
Para México es muy importante el resultado electoral de noviembre próximo en Estados Unidos, porque de ello dependerá el tipo de relación que tenga la presidenta electa Claudia Sheinbaum con su futuro homólogo, pero según las proyecciones, todo hace indicar que, aunque Biden se baje de la contienda, ningún demócrata pueda alcanzar la popularidad de Donald Trump, quien avanza a pasos agigantados hacia la Casa Blanca.
