spot_img
17.5 C
Morelia
sábado, abril 19, 2025

JUARISMO Y ESTADO LAICO

teodorobarajas

Cada 21 de marzo se celebra el natalicio de Benito Pablo Juárez García, al inicio de la primavera, la figura de quien fuera presidente de México sigue vigente más en los discursos que en la praxis política, porque él propuso vivir en la “honrosa medianía” que proporciona la retribución del servicio público, es decir su actitud marca un contraste con las prácticas codiciosas como ilegales de un alto número de corruptos enquistados en diversos niveles de gobierno que han sido beneficiados por la ominosa impunidad.

El sexenio anterior estuvo marcado por múltiples actos de corrupción que incrementó el número de escándalos de quienes vaciaban, sin recato, las arcas públicas. El cinismo se enseñoreó y la realidad estrujante superó la ficción. La brillante generación de la Reforma de la que formó parte Benito Juárez estuvo marcada por el talento, también por la austeridad y por ello es recordada, además de establecer el estado laico como la mejor opción de convivencia social.

Somos testigos de prácticas aberrantes, a la par de los numerosos actos de corrupción, también se ha incrementado el nepotismo ya como una estampa cotidiana, gobernantes que heredan cargos a sus cónyuges, hijos y demás parentela. Muchos de los que expresan notas laudatorias a Benito Juárez cada 21 de marzo en la práctica son antijuaristas, no procesan el término de austeridad republicana.

Benito Juárez es sinónimo de polémica, en un debate dividido entre quienes son sus admiradores y los detractores, en ambos casos se ha llegado al extremo. El mandatario nacido en San Pablo Guelatao fue hombre de su tiempo, no fue un “santo laico” ni el vende patrias del que hablan algunos entes reaccionarios. La historiografía está sometida al debate inconcluso.

Benito Juárez no fue un fanático, pugnó por el estado laico, la libertad de culto, ello enmarcado en una visión moderna para la época decimonónica. Aunque algunos juaristas confunden el concepto de laicidad con el de ser antirreligioso lo cual es una entera falsedad, por cierto el presidente Juárez no dejó de ser católico ni masón del Rito Nacional Mexicano.

Un renglón descuidado en los diferentes niveles de gobierno ha sido el relativo a la educación y la cultura, muchos políticos van de trapecio en trapecio para demostrar su elocuente ignorancia y una sobrada ambición, desdeñan a las artes por concentrarse en la acumulación de poder.

El estado laico es amenazado por los desmemoriados en la actualidad, los linderos entre el poder temporal y el celestial que apunta a lo metafísico son obvios, la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos es clara, aunque en la práctica se llegue a un franco soslayo.

Durante diversos lapsos históricos se invocó a Dios para perpetrar arbitrariedades, fue argumento de reconocidos déspotas para despejar su camino al poder y desde allí actuar como auténticos hipócritas.

El estado laico es la mejor opción de convivencia, creer o no creer es un derecho humano; los gobiernos lo son para todos, creyentes y no creyentes, de lo contrario serían facciosos, limitados además de equívocos. Como bien lo dijera Jesús de Galilea: a Dios lo que es de Dios y al César lo que es del César.  

- Advertisement -spot_imgspot_img
Noticias Recientes
- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img
- Advertisement -spot_img
Noticias Relacionadas

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí