La estrategia del gobierno de López Obrador, el gobierno estatal y la rectoría con la complicidad del Comité Ejecutivo General del SPUM funciono perfectamente para imponer mediante la división, la confusión y la inmovilidad de este ultimo para que se aceptara la modificación al régimen de Jubilaciones y Pensiones de la Universidad Michoacana, además de intimidar a través de los diversos medios electrónicos y de comunicación a los secretarios seccionales. La maquinaria se echo a andar desde el pasado 8 de mayo de este agonizante año cuando se invito al subsecretario de educación superior de la SEP Luciano Concheiro Bórquez como orador oficial y que en su discurso “escupió” a los pies de la estatua de Miguel Hidalgo en el Colegio de San Nicolás, en contra del modelo “neoliberal” de la educación superior, sino también de la propia universidad pública, porque para la 4T ésta corrompida por los investigadores “fifís”.
Por su parte el gobierno de Silvano Aureoles también es parte de la estrategia, porque le toca aportar un porcentaje importante del subsidio para la universidad nicolaita y por eso impuso a su hombre de confianza-algo nada nuevo para un gobernador en turno- en la rectoría mediante la Comisión de Rectoría, a Raúl Cárdenas Navarro.
Este último, en complicidad con el Comité Ejecutivo General del SPUM implementó el ataque abierto no solo al sistema jubilatorio sino también la mutilación al Contrato Colectivo de Trabajo, por una parte, y por la otra hostigar y castigar a los profesores y trabajadores nicolaitas dejando de pagar los salarios devengados.
Así de esta manera, fueron avanzando hasta llegar al Congreso del SPUM mediante la ilegalidad para quitar los famosos candados que le permitían al Comité Ejecutivo General sentarse a “negociar” la reforma al régimen de pensiones y jubilaciones; de inmediato la rectoría le envió a los sindicatos en particular al SPUM la propuesta que es confusa, nada transparente y sobre todo aumenta los años de servicios y pone una edad biológica, esta ultima tiene un carácter discriminatorio porque condiciona entre otras cosas el derecho a la jubilación sin tomar en cuenta los años del desempeño en el trabajo académico.
Se puede enumerar el contenido de la propuesta que nunca fue explicada con el suficiente tiempo a los agremiados del SPUM, pero al momento de escribir esta entrega la propuesta en medio de muchos cuestionamientos para el Comité Ejecutivo General fue aceptada por 791 afiliados, no aceptada por 304 afiliados y 56 abstenciones; se puede decir que tan solo participo menos del treinta por ciento de los afiliados en la supuesta consulta que después se convirtió en los hechos por los operadores políticos al servicio de la patronal y el gobierno en una votación.
Se puede seguir argumentando la legalidad o ilegalidad de este proceso pero lo único objetivo es que es un duro golpe para los afiliados al SPUM y que aniquila una de las mayores conquistas sindicales producto de largos años de lucha por parte de las generaciones pasadas del sindicalistas que mediante movilizaciones y huelga se lograron. También es la mutilación al Contrato Colectivo de Trabajo y qué decir del derecho a la jubilación.
Por su parte los diferentes grupos disidentes al gobierno, la patronal universitaria y de los burócratas-charros- del Comité Ejecutivo General nunca pudieron articular una propuesta de carácter político-sindical para evitar la derrota.
De nada valieron los argumentos legales, las impugnaciones en cuanto a la legalidad del actual Comité Ejecutivo General, ni todo lo demás, porque se cometió un grave error de no ir a discutir con la base sindical, que nunca se tomo en cuenta, ni tan poco se busco movilizarla en torno a la exigencia del pago inmediato de los salarios ya devengados entre otras y muchas cosas como haberse salido del Congreso pasado y no dar la pelea en la mesa de jubilaciones y pensiones para evitar quitar los famosos candados.
Se podría hacer un balance sobre el asunto del papel de los profesores disidentes pero todavía faltan muchos elementos de poner sobre la mesa, tan solo se puede decir que fue equivocado darle mucho tiempo al tema del aspecto jurídico y no poner como prioridad lo político para movilizar a los afiliados y también confiar en los buenos oficios de López Obrador, en fin, cuando el golpe salió de palacio nacional.
Esto tan solo es al inicio de una crónica de una derrota anunciada en el SPUM.
