Sí habrá reemplacamiento e incremento a tarifa de Agua Potable
“Hay dos clases de personas en una nación, aquellos que pagan impuestos y aquellos que reciben y viven de los impuestos”. Thomas Paine (1737 – 1809). Político y filósofo inglés.
Llegó el momento de las definiciones en el Congreso de Michoacán. La polémica mediática prevalecerá en torno al costo que determinarán los diputados locales para el reemplacamiento con un objetivo recaudatorio como lo ha planteado el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla.
La propuesta vigente pretende un costo de 1 mil 789 pesos por juego de placas, además de los 992 del refrendo para un total de 2 mil 781 pesos por cada vehículo que circula en la entidad.
El objetivo es recaudar 1 mil 800 millones de pesos, para que, tras pagar el costo real de las placas, la actual administración estatal disponga de 1 mil 400 millones de pesos.
Pese a las manifestaciones ciudadanas, de partidos de oposición y hasta de algunas voces del propio Morena, como las de los senadores por Michoacán, Alfredo Ramírez se negó en varios momentos a reconsiderar su propuesta. Se le olvidó que meses atrás y despachando como diputado local de Morena, su posición fue en contra de crear impuestos o hacer más caros los existentes.
La decisión ahora está en manos de los legisladores locales. Todo apunta a que acordarán algún ajuste a la baja en el costo, otorgarán descuentos a contribuyentes cumplidos y a quienes hayan pagado placas este año, por citar algunas posibilidades, pero se mantendrá el canje de placas con la intención recaudatoria, como lo planteó el gobernador.
Los acuerdos entre las bancadas pro-gobierno y opositoras alcanzarán para que se ratifique el incremento del 9 por ciento a las tarifas de Agua Potable en Morelia, como ya se acordó en las comisiones de Presupuesto y Hacienda; además de permitir un endeudamiento por 700 millones de pesos a la administración de Alfonso Martínez Alcázar.
Hay otros temas polémicos que podrían complicar la aprobación del paquete fiscal para el 2021, como el de la autonomía presupuestaria de la Auditoría Superior de Michoacán, toda vez que Ramírez Bedolla, según su propuesta de Egresos, pretende quitársela como estrategia de su gobierno y Morena, para correr del cargo a Miguel Ángel Aguirre Abellaneda.
El objetivo final es tener a su propio Auditor Carnal como lo han tenido prácticamente todos los exgobernadores, así aplicaría la rendición de cuentas a modo, a la par de fortalecer la impunidad para el gobierno vigente.
Veremos qué deciden finalmente los diputados, pero prevéngase estimado lector, la cuesta de enero llegará con fuerza y a ella tendrá que sumar incrementos a servicios como el del Agua Potable y seguramente el reemplacamiento, con algún descuento, pero tendrá que pagarlo.
Con la esperanza de que haya una próxima vez… me despido, gracias.
