En Madrid estará permitido todo lo que no esté prohibido.
Esperanza Aguirre (1952-?) Política española
Alfredo Ramírez Bedolla puede dormir tranquilo y transitar así la segunda parte de su sexenio. No solo su partido es mayoría aplastante en el Congreso del Estado, sino la oposición no existe. Así, literalmente.
El sábado en el Estadio Morelos, durante la patética y silvestre presentación de su tercer informe, el gobernador constató que al menos por lo que hace a su relación con los diputados, la segunda parte de su sexenio será como coser y cantar: fue vergonzoso el concurso de zalamería de los diputados que hablaron a nombre de cada bancada.
La honrosa excepción la constituyó el priísta Guillermo Valencia, quien fustigó que Bedolla hubiera soslayado en su mensaje el tema más importante para Michoacán, el de la inseguridad y el empoderamiento del crimen organizado. Pero el perredista Octavio Ocampo y el panista José Antonio Salas Valencia, fueron una caricatura de oposición. Ridículamente serviles con Bedolla, grotescamente doblegados ante el emperador, literalmente a sus pies. Salas abrió su mensaje diciéndose sin rubor alguno “bedollista”. Y Ocampo no se quiso quedar atrás y le recetó al gobernante cuanta flor cursi le pasó por su cabeza.
Esa es la “oposición” que tendrá Bedolla en el Congreso. ¿Qué buscan las mini bancadas opositoras asumiendo el ofensivo papel de tapetes del gobernador, si éste ni siquiera las necesita con su mayoría cuatroteísta?
Creo que solo hay una respuesta: mantener vigente la corrupta y ya esquistada práctica legislativa de recibir millones de pesos como soborno del gobierno del estado, cuando a éste le interesa alguna iniciativa en especial. Aunque sea ninguneada por la 4T, la oposición en el Congreso busca congraciarse con Bedolla para que los considere a la hora de comprar votos en temas urgentes o relevantes. Los actuales diputados saben de esa corrupción en todas las últimas legislaturas, y ahora quieren que no se sepulte porque ellos también sueñan con gozar de las mieles de la compra de votos.
No hay ninguna otra explicación a la vista para entender la ominosa actitud de la oposición el sábado en el Morelos. En todo caso, ya dependerá del gobierno si quiere seguir sobornando diputados, ahora que ni siquiera necesita de esa práctica ruin..
Y a la pesadilla, a la actual, ya solo le quedan siete días. X@jaimelopezmtz
