A un año de la Declaratoria de Alerta de Violencia Género contra las Mujeres (AVGM), la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), a través del Centro de Justicia Integral para la Mujer (CJIM), ha brindado 8 mil 756 servicios multidisciplinarios y atendido a 5 mil 799 víctimas de violencia.
Con el objetivo de ejecutar a cabalidad este mecanismo de protección de los derechos humanos de las víctimas, iniciado el 27 de junio de 2016 en 14 municipios de la entidad, el CJIM ha otorgado atención médica, psicológica, jurídica y lúdica para garantizar acceso a una vida libre de violencia.
En el marco del fortalecimiento de estas acciones de prevención, atención y erradicación de actos que atentan contra la integridad de las michoacanas, a lo largo de estos 12 meses se han emprendido sesiones de grupos de crecimiento, lo que ha dado como resultado 112 atenciones psicológicas grupales, así como la impartición de 42 talleres en espacios educativos .
Es de resaltar que para acercar los servicios integrales a quienes han sido violentadas, el CJIM ha recibido 95 denuncias por delitos de violencia familiar, lo que ha derivado que el agente del Ministerio Público haya emitido medidas de protección a las usuarias.
Desde que entró en vigor la AVGM, el CJIM ha incrementado sus servicios con la colaboración de otras instituciones, como las secretarías de Igualdad Sustantiva y Desarrollo de las Mujeres, de Salud y de Seguridad Pública, así como el Registro Civil y el Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia, lo cual ha permitido brindar atención integral en diferentes rubros para el empoderamiento de las michoacanas.
De igual forma, en el citado periodo se desarrollaron ocho reuniones con ayuntamientos que no están incluidos en la AVGM, pero que se busca integrarlos a redes de apoyo que protejan a las víctimas de violencia.
Las mujeres que asisten al CJIM tienen un rango de edad de entre los 15 y los 65 años de edad y pertenecen a distintos estratos sociales, situación que demuestra que la violencia de género no respeta clase social ni nivel académico, por lo que se exhorta a las michoacanas a denunciar y no permitir ningún tipo de agresión.
Es de resaltar que a la totalidad de las usuarias que culminaron sus procesos de recuperación se les ha dado la posibilidad de incorporarse a la vida productiva, lo cual les permite sentirse realizadas en el ámbito personal y profesional.
Con estas acciones, la PGJE refrenda su compromiso de atender e investigar todo hecho que vulnere la integridad de las mujeres michoacanas y aplicar los protocolos establecidos para garantizar su acceso a una vida libre de violencia.