De enero a septiembre del año en curso, se han cometido un total de 182 extorsiones
En los primeros nueve meses del 2023, el delito de la extorsión en Michoacán, registró un incremento de 800 por ciento, según estadísticas del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP).
En su apartado de Incidencia Delictiva del Fuero Común 2023, Instrumento para el Registro, Clasificación y Reporte de Delitos y las Víctimas CNSP/38/15, arroja que, de enero a septiembre del año en curso, se han cometido un total de 182 extorsiones.
Es decir, para enero se denunciaron un total de 3 casos; febrero, 7; marzo y abril, 20 en cada uno de ellos; mayo, 24; junio, 30; julio, 24; agosto, 30; y, septiembre, 24, para dar un total 182, cifra que, representa un aumento global de 800 por ciento.
Mientras que, comparando los primeros nueve meses del 2022 y del 2023, se registró un aumento cercano al 400 por ciento, ya que, de enero a septiembre del año pasado, fueron un total de 50 denuncias.
El año pasado, en enero y febrero se denunciaron 5 casos en cada uno de ellos; marzo, 6; abril, 5; mayo, 4; junio, 7; julio, 1; agosto, 11; y, septiembre, 6, para dar un total de 50, empero, a lo largo, de todo el año, fueron un total de 65.
A nivel nacional, de enero a septiembre del 2023, se han denunciado 7 mil 966 extorsiones, sin contar el subregistro, de todas aquellas personas, que prefieren no acudir ante las autoridades.
A mediados del año en curso, productores de limón de Buenavista y Apatzingán, frenaron labores al ser víctimas de los grupos delictivos que los asediaban con extorsiones.
Incluso en ese momento, el sacerdote de la localidad, Gregorio López, mejor conocido como el “padre Goyo”, responsabilizó al alcalde de Apatzingán, José Luis Cruz, de proteger a los grupos delictivos y por ende propiciar la paralización económica de la zona.
De igual forma, más de 300 tortillerías en Uruapan, bajaron sus cortinas como un acto de protesta por la retahíla de extorsiones que sufrían.
Estos sectores no han sido los únicos, también otros comerciantes de pollo, transporte, textileros y bares en diferentes partes de la geografía michoacana han denunciado que sufren extorsión de parte de los diferentes grupos delincuenciales.