Hay por lo menos tres empresas involucradas en la dotación y adquisición de esas camionetas; y es que dijo que hay todo un enredo y entramado en el caso que fue calificado como delicado y grave
Tras conocerse la presunta donación de camionetas a la Arquidiócesis de Morelia durante el gobierno estatal pasado, el gobernador Alfredo Ramírez Bedolla, no descartó que pudiera hasta tratarse de lavado de dinero.
Y es que dijo que hay todo un enredo y entramado en el caso que fue calificado como delicado y grave por el mandatario estatal.
Hay por lo menos tres empresas involucradas en la dotación y adquisición de esas camionetas.
Ramírez Bedolla advirtió que la investigación sigue su curso y si es necesario se dará parte a la Unidad de Inteligencia Financiera, la UIF para conocer el origen de esa adquisición.
Más aún para conocer a los responsables de esa transacción que no está a nombre de la arquidiócesis o el arzobispo Carlos Garfias.
En su momento éste ha dicho que no ha sido requerido por ninguna autoridad.