En entrevista sobre los hechos ocurridos ayer, aseguró que la Policía no puede ser omisa aun ante los hechos de riesgo que representa acudir a controlar normalistas
“Esta clase de resultados no es la que pretende ni la que busca el gobierno”, afirmó el secretario de Gobierno, Adrián López Solís, sobre los hechos ocurridos ayer entre la policía y los normalistas. Aseguró que la policía no puede ser omisa aun ante los hechos de riesgo que representa acudir al entorno de la Normal de Tiripetio cuyos estudiantes cometieron ayer secuestro de autobuses y camiones y los atravesaron en la carretera, cuando ya había habido una disolución pacifica de los manifestantes en una primera instancia.
En entrevista precisó tener entendido que los GOES acudieron un grupo reducido, pero se vieron superados por la cantidad de normalistas que salieron a hacerles algún acto, alguna forma de agresión”, y que en esos momentos de tensión “sin que mi afirmación lo justifique” hubo agentes que debieron utilizar “sus herramientas del trabajo policial con el lamentable resultado de jóvenes heridos y de policías heridos”.
Y fue aquí cuando afirmó que esta clase de resultados no es la que busca el gobierno, sino que el gobierno tiene la obligación de aplicar la ley, restablecer el orden y trabajar para generar condiciones de estabilidad y de paz. Para López Solís ante hechos de esta naturaleza “evidentemente el gobierno tiene qué sostener su atribución, su facultad del uso de la fuerza legitima”, y donde esa fuerza sea rebasada también debe asumir la autoridad su responsabilidad, enfatizó.
Por ello ayer se dispuso de parte del titular de Seguridad Pública, Juan Bernardo Corona, separar de su cargo a los responsables del operativo para ser investigados y deslindar responsabilidades, dijo el encargado de la política interior de Michoacán, pero es necesario llamar a “quienes realizan este tipo de acciones al margen de la ley para que cesen ya de lastimar los derechos de terceros”, de dañar los bienes ajenos “al amparo de pretextos que realmente no justifican este tipo de acciones”.
López Solís no quiso anticipar sobre el destino de los dos funcionarios separados de su cargo, pero lamentó el resultado de los hechos, como también es reprochable que “permanentemente este tipo de grupos estén intentando tensionar, presionar y salirse con la suya a partir de la comisión de actos ilícitos”.
Advirtió que si el gobierno permite que un episodio de violencia, de confrontación y de agresión determinen la relación con los sectores, como este que es parte del educativo, simplemente “estaríamos renunciando a la responsabilidad en materia educativa” y a la responsabilidad de atención a una relación laboral. El diálogo lo busca la SEE con los normalistas con apertura para buscar soluciones.