El Congreso del Estado de Michoacán de Ocampo, a través de las Comisiones Unidas de Puntos Constitucionales y la Comisión de Programación, Presupuesto y Cuenta Publica aprobó el dictamen por el cual se propone el proyecto de decreto para reformar el artículo 143 de la Constitución Política del Estado de Michoacana de Ocampo con el propósito de que no se pueda asignar un presupuesto menor a la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo, del monto un año anterior aprobado, pero en el mismo proyecto de decreto, contiene artículos transitorios que violan la autonomía universitaria porque condiciona la dicha reforma a la modificación de tres aspectos; el primero se refiere a llevar a cabo una reingeniería administrativa, el segundo, la modificación del régimen de pensiones y jubilaciones, tercero las prestaciones laborales pactadas en los contratos colectivos del trabajo, así como la reorganización de las casas del estudiante; a pesar de las consideraciones sobre el principio de progresividad de los derechos humanos, la autonomía universitaria, el derecho a la educación pública superior y su gratuidad. El proyecto de decreto obliga a la universidad nicolaita a cumplir en 45 días naturales, a reserva de que no se cumpla ese condicionamiento que resulta anticonstitucional, el Congreso del Estado intervendría directamente para hacer las modificaciones correspondientes.
La reacción no se hizo esperar por parte de todos los sectores de la comunidad nicolaita, incluyendo al Rector Medardo Serna González quien convoco a una reunión urgente del H. Consejo Universitario quién delibero sobre la gravedad de la amenaza de la contrarreforma por parte de los diputados locales, emplazando a los sindicatos SUEM y SPUM, así, a los estudiantes a una movilización pacífica para fijar un posicionamiento ante el Congreso del Estado donde el punto central es la defensa de la autonomía universitaria que incluye la asignación necesaria y suficiente del presupuesto para cumplir con sus funciones en beneficio del pueblo de Michoacán.
Este llamado a la unidad de acción por parte de la autoridad universitaria, en especial por el H. Consejo Universitario encabezado por su presidente el Rector Medardo Serna González es correcta y hay que apoyar a la misma.
No se puede permitir por parte de la comunidad universitaria y los sindicatos SPUM y SUEUM la imposición unilateral de una contrarreforma que viola la autonomía universitaria y los derechos laborales, estudiantiles de la Casa de Hidalgo por un congreso que en su mayor parte está conformado por diputados suplentes a punto de terminar su periodo legislativo.
Como ya se comprometió públicamente Serna González ante la comunidad universitaria y el Congreso del Estado de Michoacán de Ocampo a no buscar la confrontación- es una acción correcta por el momento- y construir mecanismos de diálogo entre la universidad y el propio Congreso, así como al interior de la propia universidad entre los diversos sectores de la comunidad nicolaita para llevar en ejercicio de la autonomía universitaria una reforma integral que salvaguarde los principios y los derechos tanto de la universidad nicolaita como de los estudiantes, trabajadores académicos y administrativos.
Hoy es el principio de una oportunidad histórica para los nicolaitas que se deben de aprovechar para construir una nueva universidad mediante mecanismos democráticos de dialogo que permitan resolver en el corto plazo la problemática estructural de la Universidad Michoacana de San Nicolás de Hidalgo.
Es un buen principio que el Rector Serna González empiece a rectificar que el camino correcto es la defensa incondicional de la autonomía universitaria convocando a toda la comunidad nicolaita, pero es también la hora de que se convoque a la búsqueda de los instrumentos democráticos que tengan el propósito de llevar a cabo la Reforma Universitaria Integrada.
Es por ello que las fuerzas democráticas de la universidad nicolaita deben de sumarse como se hizo hoy ante el Congreso del Estado de Michoacán para defender la Casa de Hidalgo.
Sin embargo el voto de confianza a las autoridades universitarias no debe de ser incondicional y para ello es indispensable la construcción de una vida nicolaita democrática, representativa y participativa en esta unidad de acción por la defensa de la autonomía de la Universidad Michoacán de San Nicolás de Hidalgo.