Informó el titular de la Secretaría del Migrante (Semigrante), José Luis Gutiérrez, quien calificó de delicada la situación que prevale sobretodo en esta zona del vecino país del norte.
Con la promulgación de la controversial Ley Antiinmigrante SB4, que prohíbe las denominadas “ciudades santuario” y autoriza a policías locales a preguntar sobre el estatus migratorio a toda persona detenida, el número de deportaciones en Texas, registró un aumento por alrededor del 15 por ciento.
Informó el titular de la Secretaría del Migrante (Semigrante), José Luis Gutiérrez, quien calificó de delicada la situación que prevale sobretodo en esta zona del vecino país del norte, debido a que la prohibición de las ciudades santuario, deja en estado de vulnerabilidad a los connacionales indocumentados.
“Se crea un estado de psicosis colectiva en la medida que todas las policías incluyendo las de los condados y ciudades también fungirán como policías migratorias, que esto que esto representa un incremento de las deportaciones de México provenientes de Texas y también viola los derechos humanos”, señaló.
Agregó que lo más “perverso” es que existe una falta de confianza a los cuerpos policiacos estadounidenses, porque han dejado de reportar los crímenes de indocumentados, situación que permite que los asesinatos de los connacionales queden en completa impunidad.
Señaló tales operaciones como retrógradas de los derechos humanos y que en consecuencia se prevé un incremento de acciones violatorias, así como un aumento en el número de deportaciones, principalmente en Texas.
Gutiérrez alertó que el panorama con la entrada del republicano Donald Trump al poder, es de extrema complejidad, porque incluso no garantiza que aquellos mexicanos documentados puedan permanecer en el vecino país del norte o sean deportados y se generen desintegraciones familiares.
