A pesar de la existencia de casi 60 expresiones religiosas, la población sin religión aumentó en más de 300 por ciento durante la última década
El pluralismo religioso no ha impedido el avance del ateísmo en Michoacán.
Datos del Censo de Población y Vivienda 2020 del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (INEGI) revelan que, a pesar de la existencia de casi 60 expresiones religiosas, la población sin religión aumentó en más de 300 por ciento durante la última década.
De acuerdo con los registros, en 2010 había 77 mil 966 personas sin adscripción religiosa.
Para el año 2020, la cifra escaló a 248 mil 109, lo que demuestra un cambio significativo en la identidad espiritual del Estado.
La mayoría de la población aún profesa la fe católica, con 3 millones 996 mil 968 creyentes.
Le siguen los protestantes y cristianos evangélicos con 237 mil 365 seguidores.
En menor medida, se identifican grupos judíos (676), islámicos (115), religiones de origen oriental (594), espiritualistas (304), cultos populares (660), New Age y escuelas esotéricas (448).
Además, se registraron 78 personas afiliadas a la Iglesia católica ortodoxa, 93 en religiones de raíces étnicas, 291 con raíces afro, y otras 47 adscritas a diversos movimientos religiosos.
Esta información permite dimensionar cómo, aun con una oferta religiosa amplia, una parte creciente de la sociedad opta por desvincularse completamente de toda creencia institucionalizada.
