Política de castellanización, migración hacia otras entidades y la constante interacción con otras comunidades, entre las causas
“El otomí prácticamente está extinto en Michoacán”, advirtió Pavel Guzmán Ulianov, vocero del Consejo Supremo Indígena de Michoacán, al alertar que el 95 por ciento de esta lengua indígena se ha perdido en la última década.
Solo, unos pocos adultos mayores de la región oriente conservan este patrimonio lingüístico.
Guzmán Ulianov atribuyó esta crítica situación a factores como la política de castellanización, la migración hacia otras entidades y la constante interacción con otras comunidades, lo que ha llevado al desplazamiento del idioma otomí.
Como respuesta, San Matías El Grande ya organiza talleres y diplomados dirigidos a niños, con la esperanza de revitalizar el idioma y mantener viva la identidad cultural de los pueblos indígenas.
El vocero subrayó la urgencia de atender esta problemática desde las propias comunidades, advirtiendo que, de no actuar, Michoacán podría perder por completo uno de sus pilares culturales más importantes.
