Acusan de extorsión y abuso al líder del SUEUM con “el silencio de Rectoría”, y quien ni siquiera tiene aval legal de la Federación como dirigente de ese sindicato titular
STUMICH exige a Rectoría de UMSNH respete sus derechos estipulados en el CCT, pues a pesar de estar separados del SUEUM, el documento rige a todos los empleados universitarios, y demandan que cubra pagos pendientes a jubilados.
Argumentar que por no ser titulares del contrato colectivo de trabajo de los empleados de la Universidad Michoacana no puede atender Rectoría las demandas del Sindicato de Trabajadores de la institución nicolaita (STUMICH), separado del SUEUM hace 7 años y habiendo cumplido la norma con su toma de nota legal, no es justificable, han reclamado los stumichistas mediante un manifiesto en donde exhiben silencio de la autoridad universitaria, ya que la Ley Federal de Trabajo establece que el contrato colectivo de trabajo contempla y beneficia en todas sus cláusulas a todos los empleados nicolaitas, aunque no pertenezcan a un mismo sindicato.
Es así que demanda el tercer gremio la presencia de la rectora Yarabí Ávila González para que solucione los asuntos pendientes de la autoridad de la UMSNH con el STUMICH, luego de que el secretario general de la Casa de Hidalgo, Javier Cervantes, el tesorero universitario Enrique Román y el hoy ex abogado de la Máxima Casa de Estudios entonces al cargo, Raúl Carrera Castillo, desde hace un año se comprometieron a resolver a los trabajadores y por ello exigen respuestas concretas a la agresión de que, acusan primero, han sido objeto stumichistas de parte de Eduardo Tena Flores, líder del Sindicato Único de Empleados y quien se ostenta como dirigente de ese gremio sin tener el aval legal del Centro Federal de Conciliación y Registro Laboral con la reciente disposición de reforma, y quien “aprovechando el silencio de Rectoría” está extorsionando y robando mediante demandas mercantiles a cientos de stumichistas, han denunciado.
Amén de que Rectoría en el anterior periodo de Raúl Cárdenas Navarro les suspendió desde entonces los descuentos de préstamos de la caja de crédito del SUEUM, a la que tienen derecho.
“Fue la institución la que creó el problema” y por eso ahora demandan que Ávila González resuelva.
Exigen también a la rectora que establezca un plazo con compromiso para pagar todos los adeudos de prima por jubilación, gastos de marcha, y que en el Consejo Universitario dé el dictamen sobre todos los agremiados en situación de permiso de jubilatorio para que se concedan de una vez por todas sus jubilaciones.
Además exigen a su vez la parte proporcional que les corresponde de los cientos de millones de la caja de crédito del SUEUM que está establecida en el contrato colectivo de trabajo de los empleados universitarios, así como también lo correspondiente al fondo de retiro y el apoyo para sostenimiento de la Casa del Jubilado del STUMICH.
Que la funcionaria “humanista ” sea congruente con el humanismo que pregona desde Rectoría, reclaman.