¿AHORA SÍ LE PREOCUPAN LOS CONTRATOS?
(…)”Ya ven que, con todo respeto al león, el león cree que todos son peludos ¿no?”
Andrés Manuel López Obrador, 26 de julio de 2022, ante la caída de Compranet
De los contratos otorgados durante el gobierno de Andrés Manuel López Obrador nos escandalizan muchas cosas: que se otorguen de manera directa contratos millonarios a empresarios favoritos y los montos de esos contratos.
Pero, si eso no fuera suficiente, además nos debe escandalizar y mucho que empresas constructoras, por ejemplo, reciban contratos para tratar la leche de Linconsa o los granos de Diconsa como sucedió en el escándalo de Segalmex. Es decir, que se otorguen contratos millonarios, a empresarios favoritos y cuyas empresas NO SE DEDICAN al servicio para el que se les contrata.
Esta situación no es nueva ni exclusiva de la administración de Andrés Manuel López Obrador. Lo que sucede es que las investigaciones por parte de organizaciones sociales sobre actos de corrupción son relativamente nuevas (de la segunda mitad del sexenio de Enrique Peña Nieto a la actualidad con algunas contadas excepciones anteriores).
Lo que sí ofende es que la promesa de cambio, de una Cuarta Transformación, solo fue de membrete. Porque las prácticas de corrupción, conflictos de interés y beneficios e impunidad a los cercanos, continúa, por lo menos, si no es que se ha perfeccionado.
Conocemos casos como el de Segalmex que le describí al inicio, como los respiradores que vende el hijo de Manuel Bartlett y que resultaron inservibles durante la contingencia sanitaria por Covid 19, y los contratos de Pemex con la prima del Presidente cuya empresa y derivadas se dedican a la explotación de varaderos, consultoras, inmobiliarias y empresas de nicho.