ATACA PRENSA A AMLO
Mientras el presidente López Obrador sigue vociferando y amenazando a los representantes republicanos de Estados Unidos por demandar la intervención del Ejército estadunidense para desmantelar los cárteles mexicanos de la droga, allá los congresistas ya comenzaron una campaña en contra del presidente mexicano que seguramente se mantendrá hasta el 2024, situación que, aunque no lo crean, podría tener repercusiones en las elecciones de nuestro país.
Prueba de ella es la columna publicada el día de hoy en el periódico The Washington Post, donde lo tachan de “demagogo populista” que está destruyendo “elecciones justas”, según artículo firmado por el periodista Fareed Zakaria, que además asegura que el objetivo de López Obrador es vaciar al INE, institución que se ha ganado la reputación de independiente y competente ante la sociedad mexicana.
El también corresponsal de CNN afirma que la intención de AMLO inicialmente fue impulsar un plan que habría matado al instituto por completo y lo habría reemplazado con un nuevo cuerpo, pero no fue aprobado en el Congreso, así que ingenió una Plan B para debilitarlo drásticamente.
El nuevo proyecto, según el texto, vacía al INE, ya que su presupuesto se reducirá en casi un tercio. Se cerrarán muchas oficinas locales y se despedirá a 6 mil miembros del personal. Sus poderes se verán reducidos y el proceso electoral estará a cargo del Estado.
El periodista asegura en el artículo que “López Obrador no puede postularse legalmente para un segundo mandato como presidente; está tomando estos pasos para asegurar que las próximas elecciones resulten en una victoria legislativa para su partido, que planea seguir dominando.
Otro artículo publicado en el semanario Bloomberg y firmado por la periodista Shannon K. O´Neal, señala que López Obrador ha resultado ser el “Donald Trump mexicano”, remarcó que “el ataque de López Obrador ha sido parte de su ataque a varias organizaciones no gubernamentales, como también a periodistas, opositores y agencias gubernamentales independientes, incluidas las que se ocupan de la corrupción y los derechos humanos.
Detalló que “todo el mandato de López Obrador ha estado plagado de declaraciones de corte comunista donde pretende hablar por los pobres, atacar a las élites y, mientras tanto, dirigir un gobierno de mala calidad e incompetente”.
Y remata asegurando que el Estado ha perdido su capacidad para controlar a los cárteles de la droga, que controlan gran parte del país, cediendo la lucha antinarco a los militares, que están profundamente plagados de corrupción y dinero del narcotráfico.
Esto es sólo el principio de la guerra que han declarado los legisladores y representantes republicanos a López Obrador, a menos de 24 horas de haber iniciado una escaramuza verbal sin sentido que rebaja la embestidura presidencial al nivel que sus enemigos quieren ver.
Que quede muy claro, los mexicanos no deseamos que un ejército extranjero se interne a nuestro territorio y haga el trabajo que no ha podido o no ha querido hacer el gobierno morenista de López Obrador.
Por ser un problema binacional donde existe responsabilidad de ambas partes que afecta la seguridad y salud pública, por qué no trabajar de manera conjunta para combatir a los cárteles y el tráfico de fentanilo que tanto preocupa a los estadunidenses, pero que poco han hecho para reducir su demanda y su consumo.