CRISIS MIGRANTE
Las autoridades de la 4T podrán decir todo lo que quieran, pero es evidente la fracaso su política en materia de migración, ya que responde a los intereses de Estados Unidos y no a los de México, lo que está a punto de ocasionar una crisis humanitaria sin precedentes en el país.
Simplemente hay que ver qué es lo que pasa a lo largo de los puentes fronterizos entre México y Estados Unidos a poco más de dos horas de que el denominado Título 42 concluya, se reportan decenas de migrantes que buscan cruzar la frontera, algunos incluso arriesgando sus vidas.
El Título 42 es una medida que adoptó el expresidente Donald Trump y después continuó el presidente Joe Biden para expulsar a migrantes con el argumento de la pandemia de la Covid-19. En ese entonces López Obrador aceptó recibir a 30 mil indocumentados mensualmente, pero las cifras de esta noche nos hace pensar que tendrá que recibir muchos más.
Desde temprano hora de este jueves, autoridades reportan una oleada de migrantes presentes en los límites entre las dos naciones en el municipio de Matamoros, quienes descienden por un barranco, otros sin ropa y con niños en brazos, cruzan el peligroso río desesperadamente, con sus pertenencias en una bolsa de plástico.
Mientras tanto en Tijuana, de acuerdo con reportes de la agencia Efe, miles de migrantes de diversas nacionalidades, incluyendo familias completas y niños, se congregan entre los muros fronterizos.
Y así en los otros puentes fronterizos.
Esta es la crítica situación que viven miles de migrantes desesperados por intentar introducirse a Estados Unidos antes de las 12 de la noche de éste día, cosa que seguramente les será imposible, debido al refuerzo policiaco y militar que han desplegado las autoridades estadunidenses a lo largo de la frontera.
Pero entonces, ¿qué pasará con esos miles de migrantes que no serán recibidos en Estados Unidos? ¿Quién se hará cargo de su manutención y cuidado en México y quién pagará por su repatriación a sus países de origen?
Se calcula que hay al menos de 200 mil migrantes intentando cruzar la frontera y unos once mil más que serán deportados a México esta misma noche. Por supuesto, la cifra aumentará conforme pasen los días y todos los expulsados regresarán por donde entraron, es decir por nuestro país.
Sin políticas públicas para atender ésta emergencia, la crisis humanitaria está a la vista, porque serán cientos, miles los que ante la imposibilidad de cruzar la frontera decidirán quedarse en nuestro país lo que provocará tensión social y saturación de servicios.
En éste, como en otros temas, el Presidente y su partido intentan ser candil de la calle cuando hay oscuridad en su casa.