La contratación irreversible de los médicos cubanos ha provocado una gran indignación y en la comunidad médica del país y una gran polémica entre Universidades públicas y privadas que imparten la carrera, Asociaciones Médicas, egresados y estudiantes de medicina, que rechazan la afirmación presidencial de que los médicos especialistas mexicanos no quieren ir a donde hay plazas.
Si bien es cierto que en el pasado, muchos médicos las rechazaron por diversas razones, hoy la situación es diferente y muchos especialistas egresados están dispuestos a cubrir las plazas en donde se encuentren.
La desocupación de egresados médicos en el país es alarmante, según el INEGI, uno de cada dos titulados, no tienen empleo, por lo que ya han manifestado a través de las redes sociales que no importa que las plazas se encuentren en zonas de alto riesgo, donde ni los cuerpos de seguridad se atreven visitar.
Además, las clínicas o unidades médicas en esas regiones, carecen de insumos para su funcionamiento, no hay equipo, instrumental y menos medicinas.
En esas regiones, personal médico carece de seguridad alguna, por lo que se suscitan con frecuencia, asaltos, extorsiones, amenazas y hasta asesinatos.
Ante esta situación, los médicos mexicanos lanzaron el movimiento #Aquí Estamos, en el que expertos de distintas áreas médicas, hablan de su trayectoria su preparación y su lucha para conseguir una oportunidad laboral.
De acuerdo a la organización, en menos de 24 horas, unos mil 500 médicos han compartido sus historias y sus datos para ser contabilizados como especialistas que buscan una plaza.
En ella, los médicos de diversas especialidades reprochan al presidente la contratación de médicos extranjeros, mientras que en nuestro país existen especialistas que han luchado por años por una plaza.
Sin embargo, el presidente ya advirtió que no va a dar “ni un paso atrás”, en la contratación de los galenos de la Isla, y llamó a los médicos mexicanos conservadores egoístas e hipócritas.
Otra más del presidente autoritario que relega a los médicos mexicanos, privilegiando a los médicos extranjeros, solo revela su desconocimiento sobre el nivel y la capacidad académica de nuestras universidades.
Esta vez, el doctor López Obrador erró el diagnóstico y por supuesto la medicina.
