EL PLAN B
Si algo hay que reconocerle al presidente Andrés Manuel López Obrador, es su tenacidad por salirse siempre con la suya, sin importarle las consecuencias que puede ocasionar su imposición con tal de imponer su voluntad.
Y es que, tras la multitudinaria marcha en defensa del INE, el presidente tuvo que reconocer que su propuesta de reforma no pasará al no contar con la mayoría calificada –dos terceras partes del Congreso- para aprobar una reforma constitucional, y ante ello, pues ya tiene un Plan B para sacar su reforma a como dé lugar.
La estrategia presidencial consiste en que Morena y sus aliados buscarán reformas legales donde sí cuentan mayoría simple para hacer cambios al sistema electoral.
En su conferencia mañanera de este martes en Palacio Nacional, el tabasqueño insistió en que enviará una reforma a la Ley Electoral para que se elijan a consejeros del INE y magistrados del Tribunal Electoral, además que no haya diputados plurinominales.
Javier Martín Reyes, investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM y expertos en derecho constitucional, expuso que EL Plan B de López Obrador es inconstitucional. “La Constitución dice claramente que: La Cámara de Diputados tiene 500 integrantes. La designación de consejerías del INE y magistraturas del TEPJF NO es por voto popular”, expuso en sus redes sociales.
También el senador de Morena Ricardo Monreal advirtió que no es posible modificar la composición del Consejo General del INE o de las cámaras del Congreso, ni que se elija a los consejeros y magistrados electorales mediante voto popular a través de una reforma a leyes secundarias, como pretende el presidente Andrés Manuel Lopez Obrador en un “plan B”, ante el rechazo de la oposición a la reforma electoral propuesta.
La cerrazón de López Obrador revela su carácter autoritario, de su ausencia total por respetar otras opiniones y de conseguir su cometido aunque haya que pisar a la misma Constitución.