LA RECONTRAMARCHA
La recontramarcha que efectuará el presidente López Obrador el próximo domingo, será una movilización organizada por el Estado, por consiguiente, habrá uso de recursos públicos para el acarreo y movilización de miles de personas que, convencidas o contra su voluntad, tendrán que participar.
Según el presidente, la marcha no tiene que ver nada con la reforma electoral, cuestión que ni él se cree, pero así desea disfrazarla para que aparente ser una movilización para celebrar la transformación del país, como la definió hoy.
Ya ayer el tabasqueño rechazaba que la organización de su marcha era por estar “ardido” por la concentración realizada por la sociedad civil donde participaron cientos de miles de personas en más de 50 ciudades del país.
El circo que se prepara servirá, además de satisfacer el ego presidencial, para que las corcholatas den rienda suelta a sus deseos y aspiraciones, para que convivan con la raza, se dejen querer y sigan en campaña de manera descarada, pese a los señalamientos y amonestaciones realizadas por el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, por su conducta abiertamente ilegal.
Él mismo reveló que para el domingo, acudirán a la ciudad de México contingentes de todos los estados de la república gobernados por Morena, lo que implicará que los gobiernos estatales tendrán que “aportar” recursos para movilizar a sus simpatizantes.
Ante ello, en Michoacán, ya los partidos de oposición denunciaron que las autoridades morenistas de diversos municipios, están obligando a los trabajadores a acudir a la marcha del próximo domingo.
A su vez le advirtieron al gobernador Ramírez Bedolla que estarán muy pendientes de que no utilice recursos del erario público para el acarreo, pues ahora la ocurrencia presidencial también se ha convertido en una competencia política para ver qué Estado lleva más gente a la concentración…por supuesto, hay que quedar bien con el jefe.
Todo lo anterior certifica que la histórica marcha civil del 13 de noviembre, le dolió y mucho a López Obrador, por lo que ahora la movilización de la venganza está en marcha.
