Compartió que presenció uno de los momentos álgidos, aunque claramente no de confusión, del encontronazo entre la fuerza policial y los manifestantes.
Eleno Sánchez Naranjo, quien protagonizó uno de los videos más circulados que evidencian el abuso policial durante la marcha del pasado martes, afirmó que fue víctima del exceso de la fuerza pública al defender a una mujer que era golpeada.
El hombre que afirmó no participó en la manifestación, pero como lo realiza diariamente salió a pasear a su mascota cuando se registró el encontronazo entre maestros y los cuerpos policiacos.
Consideró que la agresión que sufrió fue su culpa por intervenir, pero no toleró que tres elementos policiacos golpearán simultáneamente a una mujer.
Se trata de un ciudadano dedicado a las labores de mantenimiento bajo contratos en esta capital y a quién la rutina diaria de caminata junto a su fiel compañera, la perrita “Baby”, lo llevó a encontrarse con el contingente de protesta asignado al norte de la ciudad, el de los profesores de la Coordinadora Nacional de los Trabajadores de la Educación (CNTE).
Compartió que presenció uno de los momentos álgidos, aunque claramente no de confusión, del encontronazo entre la fuerza policial y los manifestantes.
“Iba circulando sobre Morelos Norte, del libramiento hacia el lado de -la fuente- El Pipila y a la altura de donde estaban los Goes -Grupo de Operaciones Mixtas de la SSP-, que es la calle que baja a -la Facultad de- Psicología, estaba una muchacha recargada en un poste telefónico, y vi cómo los GOES se dejaron ir a agredirla”, narró.
Por lo que, se detuvo junto con su perra que llevaba suelta ante la falta de tráfico, para exigirles que dejarán a la mujer, mientras ella les gritaba llorando que no era maestra, sino estudiante de Psicología.
“Yo me agarré de la tapa porque no quería dejar a mi perra, un oficial vestido de civil la subió y estando ya arriba me empujaron, me agarraron de los cabellos y me pisotearon, al igual que agredieron a mí perra, me decían pendejo eso era lo que querías”, añadió.
Ya arriba de la patrulla, dijo que los elementos condujeron por el periférico y a la entrada de la colonia Torreón, se metieron abajo del puente vehicular y los bajaron a los tres detenidos, y a un hombre que pensó era profesor protestante.
Analizó que no los presentaron en barandillas, porque el maestro se encontraba muy golpeado y le escurría sangre de un oído y llevaba la playera completamente desgarrada.
En ese momento, compartió que “al comandante de esa patrulla, que es la 3059, le pidió que le devolviera el teléfono y le contestó que él no se lo quitó, que se regresará a buscarlo a donde se lo habían arrebatado.
Por este abuso de la autoridad responsable de la estabilidad en la marcha masiva y de la seguridad pública, el señor Eleno presentó una queja en la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH) y entre las pruebas se encuentran fotografías de quien le arrebato el teléfono celular y de los elementos agresores.