La transición a la democracia en nuestro país no fue un trabajo sencillo, ocupó la participación de muchas mexicanas y mexicanos porque los antecedentes en la historia reciente más bien representaron una gran resistencia ante décadas de un sistema de partido hegemónico que vulneraba los intentos para construir un nuevo modelo fincado en la pluralidad.
Así tenemos que el Partido Revolucionario Institucional gobernó durante 71 años ininterrumpidos, fue un ente simbiótico con las administraciones de aquellos tiempos, desde 1929 con el naciente Partido Nacional Revolucionario cobijado por la sombra de Plutarco Elías Calles hasta la presidencia encabezada por Ernesto Zedillo Ponce de León estuvo en la cúpula el tricolor, entre modas sexenales, cambios de siglas, crisis recurrentes y un historial de fraudes electorales.
En 1988 se vivió por primera vez en mucho tiempo un capítulo histórico que amenazó la hegemonía del partido mencionado, un ex priista fue el candidato opositor a través del Frente Democrático Nacional que fue conformado por el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana, el Partido Popular Socialista, el Partido del Frente Cardenista de Reconstrucción Nacional y el Partido Mexicano Socialista. Aquellos comicios estuvieron oscurecidos por múltiples problemas como la famosa caída del sistema que impidió la contabilidad de votos, por primera vez el PRI perdió muchas posiciones, por ejemplo, en Michoacán la oposición del Frente Democrático Nacional ganaría 12 de 13 distritos electorales y las dos senadurías, éstas últimas con Roberto Robles Garnica y Cristóbal Arias Solís.
En el Frente Democrático Nacional se registró la participación de figuras que procedían del PRI como Porfirio Muñoz Ledo e Ifigenia Martínez, también figuraron liderazgos de la izquierda mexicana como Heberto Castillo Martínez.
Aunque el eje articulador de gran convocatoria lo fue el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, quien ya había sido gobernador de Michoacán y senador, en ambos casos por el Partido Revolucionario Institucional, la unidad opositora se debió en gran medida a quien en 1997 sería electo jefe de Gobierno de la Ciudad de México.
Cárdenas Solórzano es el referente más importante en la transición a la democracia, fue candidato a la presidencia de la república tres ocasiones, fundador y dirigente del Partido de la Revolución Democrática, esto significa que abrió camino en un México que vivió un ejercicio monolítico del poder, la alternancia no fue a través suyo sino por Vicente Fox en el entonces naciente siglo XXI, lo cual terminaría con la hegemonía del Partido Revolucionario Institucional.
Recientemente el Ing. Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano estuvo en la Facultad de Derecho y Ciencias Sociales de la Universidad Michoacana de San Nicolas de Hidalgo, por cierto, la primera institución de su tipo que fue autónoma en América Latina.
En Morelia, Cárdenas Solórzano estuvo en el acto conmemorativo de la generación de abogados Gral. Francisco J. Múgica, en el recinto universitario recibió un reconocimiento, pronunció un mensaje y saludó a muchos amigos, departió con el director de la Facultad de Derecho, Dr. Sergio Carmelo Domínguez Mota.
Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano es, sin duda, quien más aportó en los últimos tiempos a favor de la democracia, lo cual entraña un gran mérito en tiempos en los que se persiguió a la disidencia y se anulaban los intentos que empujaban para una verdadera transformación social. Hoy día seguramente nadie que conozca la historia reciente de México podría regatear el sitio del Ing. Cárdenas, la transición democrática no se explicaría sin su concurso.